¿Te parece increíble? ¡Es normal! Nos cuesta creer que un alimento tan exquisito como el chocolate pueda mejorar nuestra salud en vez de estropearla. Pero es la realidad, y a partir de hoy podrás disfrutar del placer de degustarlo sabiendo que además estarás beneficiando a tu organismo. El chocolate, de hecho, es un “superalimento”, en el mismo nivel que el Vino Tinto.
Para empezar, el chocolate es uno de los alimentos más ricos en “antioxidantes”, sustancias que protegen contra el daño celular, reducen la velocidad del envejecimiento, y previenen las enfermedades coronarias y el cáncer. Los niveles de antioxidantes en el chocolate son mayores que en muchas frutas y verduras ensalzadas por ello. Incluso, según recientes estudios, que en el propio Té.
Gracias a uno de sus componentes químicos, la “feniletilamina”, el chocolate produce ese maravilloso sentimiento de alegría y felicidad. Es decir, no es algo casual que nos sintamos tan bien cuando comemos chocolate. Las feniletilaminas pertenecen al grupo de las endorfinas, que son sustancias que levantan el ánimo al inducir un efecto estimulante del cerebro.
Distintos estudios han demostrado que las personas que sufren Depresiones importantes, presentan niveles muy bajos de feniletilaminas en sus organismos. Al ingerir chocolate estamos aumentamos la llegada al cerebro de estas sustancias, con lo que Mejoramos El Estado De Ánimo. Aunque el chocolate es una fuente importante, hay otros alimentos que las contienen, como es el queso.
En el caso de las mujeres, el chocolate es mucho más que un alimento que nos proporciona placer, salud y felicidad. Todas hemos sentido la “llamada” del chocolate cuando padecemos el Síndrome Premenstrual. Es algo más que una casualidad. Ocurre que instintivamente demandamos dos de sus componentes: las ya mencionadas feniletilaminas, y el Magnesio. Sin olvidar que su Aroma es Relajante.
Lo importante es comprender que esa necesidad de comer chocolate antes de la menstruación (y comerlo, por supuesto), no debe de hacernos sentir culpables. Nos ayudará a sobrellevar las molestias físicas y emocionales, pero claro está, sin atiborrarnos.
El chocolate también tiene Fama De Ser Excitante por su contenido en cafeína. Pues hay que desmentirlo. Una taza de café descafeinado contiene la misma cantidad de cafeína que una taza de chocolate. Aparte de la cafeína contiene otros estimulantes más suaves. Pero como contrapunto, el chocolate también contiene Ácido Valérico, que tiene un efecto sedante… ¡y eso hace que sea Bueno Para El Estrés!
También es maravilloso descubrir que Su Riqueza En Minerales Convierte Al Chocolate En Un Verdadero Tesoro. El cacao es rico en Hierro (más que cualquier otro vegetal), potasio, fósforo, zinc, cromo, cobre y manganeso. Sin olvidar que el chocolate con leche es una estupenda fuente de calcio.
En cuanto a la prevención de enfermedades, podemos asegurar que el chocolate Protege La Salud Cardiovascular (reduce los efectos del colesterol malo o LDL), disminuye el riesgo de sufrir un derrame cerebral o un infarto, y Protege Contra El Cáncer (debido, entre otras sustancias, a los flavonoides que contiene el cacao).
En cambio, el chocolate no es bueno para los animales. La teobromina (sustancia que estimula el corazón) que contiene apenas tiene influencia en nosotros, pero en cambio afecta mucho al corazón de nuestros animales.
¿Pero engorda el chocolate? Realmente no. En término medio, el chocolate aporta menos de un 1,5% del aporte energético diario. Si se come de forma moderada pues ser incluido en nuestra dieta habitual. La cantidad recomendada son unos 50 gramos al día (una chocolatina media). Y en comparación con otros dulces, ¡no tiene rival!
Si tenemos en cuenta las calorías por gramo, el chocolate tiene las mismas o menos que las galletas, frutos secos o patatas fritas que consumimos habitualmente. Nadie se siente demasiado mal si come cuatro galletas dulces a lo largo del día. Pero equivocadamente, creemos que eso nos engorda menos que una chocolatina.
Además, el chocolate Sacia y es probable que en unas horas no tengamos hambre. En cambio, si consumimos carbohidratos (como las galletas), pronto sentiremos de nuevo la necesidad de comer. Incluso algunas personas que ingieren una pequeña cantidad de chocolate como postre ¡han adelgazado! Eso es debido a que no sienten tanta necesidad de picotear pocas horas después, y mucho menos dulces industriales.
Claro que no todos los chocolates son iguales, incluso algunos pueden ser perjudiciales. Es conveniente fijarse en las etiquetas. Aunque pueden mantener el contenido en minerales y polifenólicos, el problema surge cuando tienen añadidas grasas hidrogenizadas a la manteca de cacao, o incluso usan esas grasas vegetales en sustitución de la manteca. Es mejor huir de los que digan en la etiqueta que contienen aceites vegetales.
También hay que decir que muchos chocolates contienen hasta un 50% de azúcar, por lo que no son aptos para personas diabéticas. Aunque la mayoría de las “marcas” han decidido decantarse por los edulcorantes artificiales, claro está que el azúcar es una sustancia natural y por lo tanto mucho más conveniente (siempre sin abusar, como ya hemos visto).
Así que, desde hoy mismo, ¡Disfruta del maravilloso placer del chocolate, saboréalo lentamente y deja de sentirte culpable!
Pocas cosas existen en la vida como ese manjar, que puede hacerte feliz al tiempo que cuida tu salud. ¡¿Qué más se puede pedir?!
