Gante: Esplendor y Riqueza Medieval

No podrás evitar parecer un turista japonés en Gante, fotografiándolo todo con avidez. Y es que los amantes de la arquitectura romántica se vuelven completamente locos.


Los Tesoros de Gante


Gante


Gante es una de las espléndidas ciudades medievales de Bélgica que han sobrevivido a los estragos del tiempo y de la guerra. Sus orgullosos lugareños dicen, con mucha razón, que es la mejor de todas ellas. La ciudad tiene más edificios históricos que todas las del resto del país juntas.

Es imposible que no te conmuevan los bellísimos edificios antiguos de Gante, sus callejuelas, sus calles adoquinadas y sus canales, ya que son un reflejo de la riqueza medieval y del éxito procedente del mercado de la lana que se importaba de Inglaterra. El Graslei, el barrio de casas gremiales junto al agua, es realmente impactante. Hay muchas iglesias, entre las que destacan las de San Jacobo y la de San Nicolás.

Las tres béguinages (que albergaban órdenes de monjas), el campanario y el mercado de tela adyacente están declarados Patrimonio de la Humanidad. El trío de torres antiguas que dominan el contorno de la ciudad pertenecen a la catedral de San Bavón, a la de San Nicolás y al campanario. Y también es obligatoria la visita a la iglesia de San Miguel, iluminada por la noche desde el puente de Grasburg. Todo un ejemplo de la cautivadora belleza de esta increíble ciudad.

A pesar de las tiendas interesantes tiendas, los fabulosos restaurantes y cafeterías que surgen por doquier, la cultura es el punto fuerte de Gante. Cuenta con fabulosos museos y con animados y concurridos festivales anuales recuerdo del comercio pasado y del presente, que se efectúa a través del puerto ubicado al norte de la ciudad y por el que se accede al mar a través del río Escalda.

La mejor época del año para visitar Gante es, sin duda, el verano. Es el mejor momento para sumergirse en la incomparable atmósfera medieval de la ciudad, ya que la luz envuelve todo de una cálida y mágica luz.


Dante: Qué Ver

Entre todas las maravillas de la ciudad, no puedes perderte el impresionante “políptico de Gante” de la catedral de San Bavón, titulado La adoración del cordero místico y atribuido a Jan Van Eyck.

Ni tampoco puedes eludir la visita al Castillo de Gravensteen (conocido como el Castillo de los Condes) reconstruido en 1180, y su espeluznante colección de instrumentos de tortura.

Los tejados del casco antiguo que se pueden contemplar desde el campanario de 90 m de altura.

El Festival de Gante, que dura 10 días y se celebra a finales de julio con música, fiestas, juegos artificiales, teatro callejero y mercadillos.


Para visitar la espectacular feria floral, es necesario planificar la visita con antelación, ya que se sólo se celebra cada 5 años.

Gante que ver